La avena es quizá el cereal más completo que existe con un balance de carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales casi perfecto, colocándola dentro de los alimentos más saludables que existen. ¿Quieres saber cómo te puede ayudar en el control de la Diabetes? Sigue leyendo y conoce todos sus beneficios.
¿Qué beneficios tiene comer Avena para los Diabéticos?
La avena es principalmente una fuente carbohidratos, los cuales son necesarios para tener la energía suficiente que nos permite realizar todas nuestras funciones, tanto físicas como biológicas.
El problema con los carbohidratos cuando eres diabético es que estos se convierten en azúcar que se desplaza a tu torrente sanguíneo y, si no se escogen las fuentes adecuadas, el nivel de glucosa se puede salir de control.
Este no es el caso de la avena, ya que los carbohidratos que tiene son de liberación lenta, permitiendo a tu cuerpo poder metabolizarlos sin el riesgo de sufrir los picos de glucosa como sucede con varios de los alimentos y cereales procesados que consumimos hoy en día. Por lo que es una opción ideal para usarla en el desayuno y así empezar el día lleno de energía.
La avena es el único cereal que posee los dos tipos de fibras, insolubles como los demás cereales y solubles. De estas últimas las betaglucanos ayudan a ralentizar el proceso de absorción de los carbohidratos y atrapan residuos de bilis, colesterol y grasas para después desecharlos, depurando el aparato digestivo.
De esta forma no solo te ayuda a mantener la glucosa estable sino a nivelar el colesterol alto y liberar a tu organismo de impurezas. Además te permite mantener la sensación de saciedad por más tiempo, disminuyendo el hambre y los antojos durante el resto de la jornada.
Por otro lado, aparte de los carbohidratos la avena contiene proteínas y grasas, lo que la convierte en un auténtico súper alimento que te aporta los 3 macronutrientes esenciales para tu día a día.
Y no sólo eso, sino que también es rica en varias minerales y vitaminas que desempeñan un papel importante en el control de la diabetes, tales como el zinc, magnesio, calcio, potasio y vitaminas del complejo B (B1, B2 y B6).
Para saber más: Las Vitaminas del Complejo b y su Importancia en el Control de la Diabetes
¿Cómo puedes comer la avena si eres diabético?
Cómo ya vimos, la avena la puedes encontrar como ingrediente principal en un sinfín de productos, desde galletas, cereales o panecillos. Pero esto no significa que estos productos sean totalmente saludables ya que pueden contener varios ingredientes añadidos, como azúcar o sustitutos, colorantes, sal, grasas trans, entre otros, que podrían tener el efecto contrario. Esto aplica incluso a algunas marcas de avena instantánea.
Así que, antes de lanzarte a comprar cualquiera de estos productos que se venden como saludables, cerciórate de que los demás ingredientes no interfieran en el control de la glucosa (azúcar o edulcorantes), colesterol (grasas trans) y presión arterial (sal).
Por otro lado, las presentaciones en las que más puedes aprovechar los beneficios de la avena para controlar la Diabetes son:
Granos de Avena enteros: Este tipo de Avena es la extraída directamente de la planta, sin ningún procesamiento y por tanto, es la más natural. Pero también la más difícil de digerir por lo que se necesita cocinarla durante aproximadamente 1 hora para que se ablande y hacerla comestible.
Avena cortada al acero: Se utiliza una cuchilla de metal para cortar los granos y su tiempo de cocción se reduce a la mitad (20-30 minutos) en comparación con los granos enteros.
Copos de avena: Son las tradicionales hojuelas y es la más popular entre las presentaciones, son muy fáciles de preparar ya que solo requieren cocinarse unos 3 a 5 minutos.
Avena instantánea: Es la más procesada y fácil de preparar ya que sólo requiere de 30 segundos a un minuto de cocción. Sólo revisa que no contenga azúcar, sal o cualquier otro agregado.
De esta forma ya puedes utilizar la avena para elaborar varios platillos o simplemente hacerte unas gachas hirviendo los copos de avena o instantánea con leche. Puedes agregarle almendras, canela y arándanos (o cualquier otra baya) para darle más sabor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Te gustó? Nos encantaría saber tu opinión